domingo, 19 de octubre de 2008

Monopolio Creativo

El otro día, estuve mucho rato viendo televisión (algo que tenía tiempo sin pasar). Mientras cambiaba de un canal a otro me di cuenta de algo, tuve una especie de epifanía, y es que ¡todos los infomerciales de mierda son igualitos! En serio, con tanta gente haciendo publicidad en el mundo, estos carajos llevan desde el infame Ginsu 2000 (para los que no se acuerden, este era un cuchillo que aparentemente cortaba latas, zapatos y tubos como si fueran mantequilla... mi abuela lo compro y tenía problemas para picar un tomate...) haciendo cada uno de los miles de infomerciales que inundan nuestra pantalla de exactamente la misma manera.

Siguen exactamente el mismo esquema. Primero, encontramos, la pantalla en blanco y negro o sepia claramente, y una persona lidiando con una situación tortuosa que, inevitablemente lo convierte en gordo/calvo/infeliz/desordenado/divorciado etc. El narrador (que sin duda es siempre el mismo carajo) anuncia, con un tono que parece venido de entre las nubes, la solución a todos sus problemas Ejm: introduciiieeeeendo el nuwwwevoouu (inserte el nombre del producto inutil acá) 3500 (tienen a juro que tener número, exepto claro, ervamatín y reduce fat fast).

Posteriormente del anuncio mesiánico que va a solucionar todos los problemas de nuestras vidas, viene, en mi opinión, la parte más patética del infomercial, los testimonios. Hay dos maneras de enfocar ésto, la primera, es apelando a la "autoridad", la opinión de algún "experto" que porsupuesto es "internacionalmente reconocido" el cual aboga incansablemente acerca de las bondades del producto infomercializado. El mejor ejemplo de este caso es "Dr." Jorge Hane, "gurú internacional de la pérdida de peso" (el tipo de reduce fat fast), dos cosas. Primero, el hecho de que salgas en televisión con una bata blanca no te convierte en doctor, segundo, ¿amigo, quíen coño lo convirtió a usted en el gurú internacional de la pérdida de peso, a cuenta de qué?.

Pero los testimonios son aún peores cuando involucran a "gente común y corriente". El modus operandi en este caso es el siguiente: en el cuadrito de ANTES, vez, a una persona, triste, deprimida, desaliñada, desempleada y sóla, sin ninguna esperanza de éxito en la vida, una especie de esperpento de ser humano que sigue vivo gracias al prozac. Pero, NO, basta fijarnos como en la imagen que aparece en el DESPUÉS, la misma persona (tal vez con un poco de cirugía plástica o maquillaje) arreglada, feliz, casado con hijos, perro y minivan, y CEO de una transacional poderosa, y claro, según ellos dicen, todo gracias al new toby (o similar producto inútil), ahora que puedo planchar, o mejor dicho, desarrugar mi ropa antes de salir ¡todo en mi vida ha cambiado!

Por último, viene lo que es conocido como llamado a la acción, es cuando el omnipresente narrador exclama: ¡llameeee YAAAAA! a los teléfonos que salen en pantalla (debo acotar en este momento que esta escena es realmente patética, el fondo y las banderitas de los paises tienen 12 años que no las cambian, y siempre es lo mismo, la pantalla dividida, en una esquina sale la mujer usando el orbitrek y el resto son los números de los países y los signos de visa y mastercard.

Ahí, en el momento del "llamee yaaa", cuando crees que el infinito fastidio se terminó, te espera una sorpresa, sale el narrador exclamando "y si eres uno de los primeros 10 idiotas en llamar te regalamos el (inserte nombre del producto complementario secundario al producto inútil principal) o, cuando son avaros, simplemente se limitan a ofertar a "un precio especial" el previamente mencionado producto inútil complementario.

Mi duda al respecto es, simplemente, si es una sóla compañía de publicidad la que realiza todos los infomerciales, en ese caso, su mediocre falta de originald, no deja de ser mediocre, pero sería hasta cierto punto, entendible. Por otro lado, si son compañías publicitarias distintas, ¿por qué todos son iguales, acaso hay una especie de dogmas milenarios inmutables de los infomerciales?¿son un formato preesetablecido, rígido y sin lugar para innovaciones?¿existe una especie de panel infomercialístico que juzga los cánones pétreos de los mismos y que los prohibe si no los cumplen?

Bueno, después del despotricamiento, debo agregar, que por lo menos, para ciertas personas, los infomerciales tienen bune poder de convencimiento. Mi abuela, persona nada bruta ni anticuada (tenía messenger antes que yo, le sabe poner la clave al wifi, cosa que yo ignoro) ha comprado varios de los productos ofertados, como lo son: el magic bullet (una especie de picador de cebolla glorificado), el swindle sweeper (un lampaso, o como dicen en Caracas, coleto, glorificado) y, como ya mencioné, los infames cuchillos ginsu 2000, los que en efecto, iniciaron todo este rollo.

1 comentario:

C.M dijo...

House revisa mi nuevo blog politicahodiernus.blogspot.com/